si, y que esta vez, tenga sentido.

es algo difícil de describir, tal vez, una pavada, pero en fin, la publicación no va a menos, soy una simple hechicera malograda. He logrado varios hechizos modestos, pero casi siempre me han traído consecuencias nefastas y desagradables. No soy quién para hablar de la moral. No soy quién para decir que está mal,pero todo el mundo habla de eso en estos días. No sé quién soy, realmente no me conozco, no conozco tampoco los medios para conocerme, pero no me importa, así habré dicho algún día, cuando las cosas pasen de moda y los tiempos corran distinto. Yo se qué soy más allá de la miseria, sé que soy pero sé que no me pertenezco, no pertenezco a este mundo maravilloso pero efímero, quizás pertenezca a todo lo contrario. Siempre elijo el camino difícil, no soy quién para hablar de estas cosas, pero no me pertenezco, y más bien, esto es un grito de ayuda en un barco a la deriva, directo a naufragar en las garras del olvido.

La muerte es para mí algo efímero, cuestionable, aturdido, no sé qué carajo es lo que me dicta la conciencia, pero aquí estoy, y aullando a la luna el lobo ahoga sus penas, si supiera el rumbo de mis deseos, confirmaría más mis miedos, pero no soy quién para hablar de eso. Últimamente ni de mí puedo hablar sobre esto, es tan difícil darse a entender, que estoy lejos de lograrlo plenamente, estoy hecha polvo, digámoslo así, (y no me refiero ahí abajo!jaja) no, ya hablando en serio, el mundo gira al revés, las vacas dan leche y no miel, el cielo se torna borroso y el césped o huele a laurel, estamos perdidos, estamos perdidos sin el corazón, sin la vida que hay en vos y sin la peste inundada de razón. Razón. Razón pura y refutadores de leyendas que no saben más que dilucidar problemas que en realidad no existen. a quién le importa el cielo? a quien? si esto ns pertenece, esto también...

pero no,

los caballos no somos así. tenemos cuatro patas, una materialidad indeble y un cielo de pastos verdes.

y vos?

vos qué sos? un aparato de luces y sombras que no se compara al amor

una vida sin sentido que viaja entre rumbos posibles pero inmaduros y ?

quien sabe si esto podría llamarse amor?

si todo lo que nos queda no es más que una ilusión.

pasajera, digámoslo.